Pesebres para niños
Este año me ha dado por emplearme a fondo en la decoración navideña de la casa. Antes del nacimiento de mi minimoi había sido bastante pasota pero este año mis intenciones son bien distintas y tengo ganas de llenarlo todo de rojo y verde como en las pelis.
Sin embargo las pequeñas dimensiones de mi piso no me permiten hacer muchas locuras (no quiero ahogarme entre calcetines y bolas navideñas) por lo que estoy intentando ser lo más práctica aunque creativa posible. Así que éste es el primero de una breve serie de post de decoración navideña original y práctica.
Pesebre Matrioska en John Lewis (12GBP)/ Matrioska nativity John Lewis (12GBP)
Mis primeras investigaciones han sido en el campo de los pesebres. Desde que tenemos a una peque que trepa por todos lados está claro que el antiguo belén de cerámica corre un grave peligro. Así pues he decidido unirme al enemigo y buscarle un pesebre-juego que pueda morder, tirar y golpear a su antojo.
Primero he encontrado estos de madera en rinconde.com. Son de estilo bastante tradicional y están pensados para que los niños jueguen con los muñequitos hasta bien mayores.
En imaginarium ofrecen dos opciones: un pesebre de madera para niños a partir de los 12 meses y otro de tela estilo marionetas recomendado para minimois de 3 a 8 años.
Un clásico es ya el pesebre de Playmobil para niños mayores que se puede encontrar en amazon igual que este genial belén de Charlie Brown.
Pero para quien busque una opción más trendy hemos descubierto este bonito colorido pesebre de madera de Alexander Girard (en venta en vitra) y el a punto de convertirse en mítico Presepe de Alessi. A ver si algún día hacen la versión en plástico porque la porcelana pintada queda automáticamente descartada en mi caso.
Aunque si ninguno de estos convence siempre se puede optar por las manualidades y hacerse uno propio de cartón o incluso de galletas (los moldes junto con la bolsita y los utensilios para decorar con glaseado los venden en lakeland.co.uk por unos 10 euros, o en amazon.com por $9). No hay opción más dulce (ni que dure menos)!
Y vosotros, ¿tenéis ya pesebre en casa?